Adjetivos para los cinco sentidos.
Normalmente, a la hora de describir, solemos utilizar siempre los mismos adjetivos.
A continuación, tienes una lista de adjetivos poco usuales que pueden
servir para hacer descripciones más certeras y originales.
Más que en la interacción de personajes, el uso de adjetivos es esencial en las descripciones de paisajes. Pues cada sentido se
ve afectado por la presencia del entorno, y del mismo modo que el
personaje lo está sintiendo, es menester del escritor trasmitir estas
emociones al lector. Aportando adjetivos valorativos, sugerentes y precisos se pueden plasmar estas sensaciones sobre el papel, como se muestra en los siguientes ejemplos:
Vista: El prado verdeante dejaba entrever algunas amapolas.
Gusto: El humo de la hoguera dejaba un sabor amargo en la garganta.
Tacto: Sus dedos resbalaron por el cristal frío y sudado de la cerveza.
Oído: El barullo del mercado penetraba punzante a través de los oídos.
Olfato: El aroma dulce de las fresas del huerto llenó sus pulmones.
Cada adjetivo, por regla general, hace referencia a uno de los cinco sentidos. Puedes utilizar todos estos como recurso
para tus propias descripciones. Así te será más fácil darle realismo al
entorno y hacer que los cinco sentidos sean partícipes de tu obra.
Adjetivos para la vista.
Amarillo, anguloso, azul, blanco,
circular, cuadrado, grande, minúsculo, negro, pequeño, redondo, verde,
violeta, rojo, triangular, lívido, turquesa, índigo, añil, azulgrana,
colorado, bronceado, albo, púrpura, nacarado, encarnado, rubio, dorado,
verdinegro, pajizo, pardo, oliváceo, castaño, tabaco, avellanado,
parduzco, trigueño, fucsia, cobrizo, marengo, ceniciento, grana,
magenta.
Adjetivos para el oído.
Atronador, penetrante, estridente,
rumoroso, martilleante, cavernoso, retumbante, crujiente, destemplado,
susurrante, vibrante, insistente, chirriante, bronco, agudo, alto,
atronador, bajo, bullicioso, cadencioso, cascabelero, chirriante,
clamoroso, crujiente, estrepitoso, estridente, estruendoso, fragoso,
fuerte, gangoso, martilleante, metálico, mugidor, rechinante, resonante,
ronroneante, ruidoso, silbante, sostenido, susurrador, ululante,
vibrante, zumbador.
Adjetivos para el olfato.
Embriagador, sofocante, penetrante,
refrescante, fétido, apestoso, espeso, maloliente, viciado, excitante,
aromático, fragante, concentrado, mareante, agradable, apestoso,
aromático, asqueroso, delicioso, desagradable, embriagador, excitante,
fétido, fragante, hediondo, hediente, maloliente, mefítico, oloroso,
odorífero, penetrante, pestilente, pestífero, refrescante, subyugante,
etéreo, rancio, aireado, mohoso, viciado, fresco, putrefacto, tenue,
ligero, floral, y acre.
Adjetivos para el gusto.
Apetitoso, insípido, dulce, afrutado,
amargo, jugoso, insulso, dulzón, semidulce, agridulce, picante,
empalagoso, rancio, ácido, podrido, salobre, amargo, ácido, agridulce,
ahumado, delicioso, dulce, fresco, insípido, picante, rancio, sabroso,
salado, soso, suave.
Adjetivos para el tacto.
Granuloso, gélido, templado, bochornoso,
tibio, caldeado, quemado, espinoso, calloso, escamoso, nudoso, arenoso,
fino, terso, viscoso, basto, blando, duro, tupido, estropajoso, tierno,
hueco, dúctil, fláccido, maleable, flexible, áspero, aterciopelado,
blando, caluroso, deformado, delicado, flexible, frío, húmedo, liso,
macizo, pastoso, pegajoso, pesado, pulimentado, refrescante, rígido,
rugoso, seco, sedoso, suave, tibio, untuoso.
No hay comentarios:
Publicar un comentario